Ah, mi dieta. Esa gran incomprendida. Dices que no comes pasta ni cereales y a la gente ya le entra el agobio. Dices que comes grasa y poco más y te echan agua bendita en plan exorcista. Yo creo que muchos encontrarían más fácil creer las teorías conspiratorio-alienígenas del agente Mulder que creer en esta dieta. Y eso que, como prueba, a mi me tienen delante.
/baba
En fin, que claro que me aseguro de comer todos los días carbohidratos. Lo que no hago es comprarme una balanza para ir pesando las patatas a ver si como 50 grs, 50.5 grs. o 50.9 grs. Tampoco cuento calorías, que una cosa es ser friki y otra obsesiva. Yo como todo a ojo, y los días que salgo a comer fuera, como ayer con mis amigas, como de todo y me lo paso fenomenal ^^
Pero volviendo al tema, para la tranquilidad de mi padre y para desmitificar esa idea de que en esta dieta no se comen carbohidratos, he hecho unas cuantas fotos hoy:
Mi frigo. Parece un poco vacío, pero con la plaza al lado, compro cada día el pescado o la carne que me apetece, y me lo hago al momento. Cierto que me faltan espinacas o verduras, pero hoy ya no podía con tanto peso :P El resto son yogures biológicos de todo tipo, de vaca, de oveja, de cabra, nata, mantequilla, huevos, fruta, queso de tetilla en el cajoncito y boniatos asados al lado de las zanahorias.
Mis tres puñados de fruta diarios: grosellas, fresas y frambuesas, y a veces también plátano. Siempre en el batido del desayuno y nunca después de comer, que me dan un hambre a las dos horas que me muero.
Este batido lleva kéfir, huevos, mantequilla, nata, aceite de coco y la fruta, y como decía ya hace tiempo, aguanto con él de 9 a 3- ¡pasada total! También tomo café (solo) y a veces ciruelas pasas, como hoy.
Mi comida de hoy- salmón como fijo 3 veces a la semana. Y esta noche probablemente coma boniato asado y yogur- aunque siempre lo decido en el momento, mañana os contaré!
Me alegro, Popy. ¡Hay que cuidar al páncreas!
ResponderEliminarLo más exquisito de todo es comprar para el día y consumir en el día. Esta es una costumbre que la ciudad debe importar de los pueblos pequeños en donde las señoras salen a la tienda de la esquina para comprar un ingrediente que se les ha olvidado cuando la olla ya está en el fuego.
Mil besos, Popy.